En 2006, tres jóvenes decidieron compartir su casa con personas sin hogar en Francia. A partir de esta primera experiencia exitosa, nacieron otros departamentos solidarios entre jóvenes y personas sin hogar en Europa y en México. Hoy en día somos más de 300 personas en el mundo compartiendo esta forma de vida.
En Lázaro, elegimos vivir juntos para construir la amistad y la confianza en personas que no se hubieran conocido si no.
Creemos que las personas sin hogar, además de un techo, necesitan superar la soledad compartiendo la vida diaria creando relaciones de amistad.
Personas sin hogar. Se presentan al comedor social. Se comprometen a respetar las normas (no alcohol, no drogas, la violencia está prohibida, hay cena fraterna semanal, participación económica para comprar la comida en común, se paga una renta y participa en las tareas de la casa). La duración de su estancia no está limitada.
Jóvenes profesionistas, en su mayoría de entre 25 y 35 años, que quieren dar sentido a su vida cotidiana. Tienen una vida profesional o estudian. Están en Lázaro mínimo un año, renovable. Se comprometen a respetar las normas de la casa.
Personas sin hogar. Se presentan al comedor social. Se comprometen a respetar las normas (no alcohol, no drogas, la violencia está prohibida, hay cena fraterna semanal, participación económica para comprar la comida en común, se paga una renta y participa en las tareas de la casa). La duración de su estancia no está limitada.
Jóvenes profesionistas, en su mayoría de entre 25 y 35 años, que quieren dar sentido a su vida cotidiana. Tienen una vida profesional o estudian. Están en Lázaro mínimo un año, renovable. Se comprometen a respetar las normas de la casa.
Una casa Lázaro puede acoger hasta 45 personas: departamentos para hombres, para mujeres... Pero la vida en común no se detiene en la puerta de nuestras casas: también tenemos un comedor social, que abre cada sábado y domingo. ¡Ven a conocernos!
Tratamos de acompañar a nuestros residentes en su búsqueda de trabajo. Creamos actividades económicas para que las personas encuentren trabajo y que la casa se autosustente.
Acompañamos a nuestros residentes en su camino hacia la liberación de sus adicciones.